Observaciones a este blog

OBSERVACIONES A ESTE BLOG:
+13-12-20. Tras un periodo largo en el que me he quitado el cansancio que tenía del montaje de mis excursiones, vuelvo a sacar nuevas. Voy a ir hacia atrás sacandolas por lo que hay que estar al tanto.
+ 11-12-25. Los distintos artículos que aquí publico están ordenados por la fecha en la que ocurrió la excursión o acontecimiento. La falta de tiempo, a la que todos estamos sometidos, hace que publique excursiones bastante más tarde de cuando se realizaron. Eso da lugar a que parezca que en la página no se publica nada nuevo pero se están incluyendo artículos en fechas pasadas. Ruego a mis seguidores fieles que repasen un poco los meses y años pasados en busca de artículos que no han leído.

domingo, 7 de noviembre de 2010

10-11-07 Cabo Vidio (Asturias).

Día complicado por las predicciones meteorológicas. Daban lluvia y, efectivamente, durante muchos momentos nos ha estado lloviendo una lluvia más o menos intensa.
No teníamos muy claro adonde ir pero decidimos bajar hasta la costa asturiana. Y lo hemos hecho en la costa occidental buscando un cabo llamado Vidio.
Esta zona es prácticamente un acantilado y son pocas los lugares donde se forman pequeñas calas donde se puede decir que hay una playa.
Excepcional circular por la antigua nacional por esta zona en esta época donde los castaños y eucaliptos prácticamente cierran la carretera.
En cuanto al cabo, proporciona unas excepcionales vistas. Llama la atención la pared vertical del acantilado de 100 m justo en el frontal del faro.





martes, 12 de octubre de 2010

10-10-12 Las Tuerces y el Cañón de la Horadada (Palencia).

Entre pitos y flautas llevamos tiempo sin hacer una excursión por las tierras de Castilla y León. Este último día del puente del Pilar no podemos desaprovecharlo y salimos a ver.
Habíamos visto en la tele unas imágenes de la pequeña ciudad encantada que conforma Las Tuerces y se nos quedó en la cabeza visitarlas.
Así que salimos por la muchas veces nombrada por mi Cl-626 en dirección a Palencia. Es un buen recorrido en coche pero esperamos que valga la pena.
Cuando llegamos a Aguilar de Campoo tomamos la N-611 en dirección a Palencia y pronto nos desviamos en dirección a Villallano. Cuando se llega a este pequeño pueblo hay que desviarse por un camino de tierra en buen estado para llegar a Villaescusa de las Tuerces.
En esta población se inicia el ascenso a la colina donde se encuentra la ciudad encantada. Realmente nos equivocamos al llegar a Aguilar de Campóo y nos fuimos por otra carretera. Pronto vimos que no era el camino y tomamos el antes indicado. Tampoco es el más directo sino otro que hay un poco más adelante, por la nacional citada,
Dejamos el coche en el pueblo. Hay algunos buenos rincones para dejarlo. Comenzamos a subir la colina que hay al sur por un camino de tierra. Pronto nos encontramos con un cartel que indica el sendero que sube. Apenas iniciado nos encontramos una fuente que sale de la propia roca caliza. Saca un buen caudal de un agujero en la pura roca y es aprovechado para abastecer al pueblo.


Empezamos a encontrarnos buenas paredes que limitan distintas banquetas. Se llega a la zona superior de la colina donde se pueden encontrar las distintas formaciones.




Se trata de una colina moldeada por un ciclo kárstico avanzado. Hace 86 millones de años se formó en el mar distintos estratos calizos a partir de sedimentos de animales marinos. Luego estos estratos quedaron en superficie y fueron moldeados por los distintos agentes atmosféricos y marinos. La roca caliza se solubiliza por la acción del agua cargada de oxigeno y se descompone. Agentes atmosféricos como las heladas cuartean la roca provocándoles hendiduras. Distintas variaciones en el nivel del mar van provocando acantilados con erosión diferencial. Estos y otros fenómenos van provocando la multitud de pasillos, oquedades túmulos aislados y otras formaciones en las que es divertido perderse. No es muy grande la zona pero suficiente para disfrutar perdiéndose por ella y al mismo tiempo disfrutar de los paisajes que desde aquí se contemplan de los llanos alrededor del río Pisuerga que discurre por su base.



También disfrutamos encontrando champiñones, pedos de lobo y otras setas que crecen en esta época.

Tras esto, bajamos al pueblo y cogimos el coche para ir al Cañón de la Horadada. Para ello, hay que ir de nuevo a la N-611 y seguir en dirección a Palencia. Pronto, hay un desvío a la derecha que nos lleva a Olleros de Pisuerga. Pasamos el pueblo y el río y llegamos al desvío que lleva a Santa María de Mave. No hay que desviarse sino seguir recto. Apenas pasados unos metros, hay un pequeño camino a la izquierda con un cartelito que dice camino Horadada. Dejamos el coche en un prado un poco más adelante y seguimos el camino.
Primero admiramos una enorme máquina cosechadora de patatas. En esta zona se hace patata de siembra.
Seguimos el camino y nos vamos metiendo en la garganta excavada, a través de los siglos, por el río Pisuerga. Pronto, algo así como a un kilómetro, aparece varios grandes edificios junto al río. Es un gran molino. En toda la zona de Palencia, junto al río Pisuerga o junto al canal de Castilla podemos encontrar varios de estos grandes molinos harineros, prueba de que estamos en el granero de España. No está abandonado, ahora se utiliza como minicentral eléctrica que seguramente da más dinero.


Por un lateral se continúa y el sendero empieza a ascender. Se pasa por un bonito abrigo rocoso que sirve de pasillo y luego por una cueva horadada por ambos lados. Con ello se sube hasta una repisa por la cual se discurre con el cañón a la izquierda. También aquí se pueden encontrar cantidad de setas. Continuamos varios kilómetros hasta que el cañón se abre de nuevo, ya cerca del pueblo de Villaescusa de las Torres, el pueblo desde donde subimos a las Tuerces. De hecho el sendero se puede hacer entre los dos pueblos pero nosotros volvemos sobre nuestros pasos para llegar al punto de inicio.
Tras esto paramos en Olleros de Pisuerga. Hemos leído que hay una iglesia troglodita y vamos a intentar verla. Está en un lateral del pueblo, se ve desde la carretera. Tuvimos suerte y encontramos al que la enseña. Solo lo hace con reserva previa y para grupos. Acababa de enseñarla a un grupo y conseguimos hacer que volviera para mostrárnosla.
Vale la pena verla. Está excavada en roca calcarenita, posee dos naves separadas por columnas, una sacristía y una capilla lateral. La sacristía parece que fue una pequeña iglesia más antigua. La capilla lateral se utilizó para enterramiento de algún prior o abad.


Por lo que cuentan los textos, la capilla fue construida por monjes eremitas allá por el siglo VIII. No obstante hay quien indica que puede ser anterior, incluso del siglo IV.
Todo el suelo de la iglesia está lleno de enterramientos. Alrededor de la iglesia, en el exterior, hay también numerosas tumbas antorpomorfas. Incluso el cementerio actual está junto a la iglesia.

Cabe destacar también el Cristo crucificado que hay en una de las naves de la iglesia.
Dispone la iglesia de una torre separada del resto de origen medieval. Bajo ella hay otro habitáculo horadado en la roca. Los estudiosos indican que pudo ser empleado como baptisterio. Piensan que si se excava se pueda encontrar una balsa para hacer la ceremonia por inmersión.
Vale la pena ver esta iglesia.
Entre el pueblo y el río Pisuerga vimos un camino con un cartel que indicaba el acceso al castro de Cildá. Ya no subimos a verlo pues ya hemos andado bastante. Por lo que he leído fue una ciudad cántabra que fue conquistada por los romanos el año 26 a.C. Posteriormente siguió habitada en época visigoda y se abandonó en el siglo XII. De esta ciudad se pueden ver las murallas.
Destacar la mina San José, también ubicada entre el pueblo y el río, en la ladera de la colina que hay hacia el norte. Se puede ver desde la carretera fácilmente las escombreras de varias bocas. Tampoco fuimos a visitarlas. He leído en internet que se explotaron durante algún tiempo antes de la guerra y después por la gente del pueblo para autoabastecerse. También he leído que la gente sacaba islan en el río Pisuerga. Este carbón procedía de las lejanas minas de Barruelo de Santullan.

sábado, 4 de septiembre de 2010

10-09-04 Santa Colomba de Somoza (León).

Hoy hemos decidido otear un poco una zona desconocida para nosotros. Se trata de la maragatería en la zona del camino de Santiago a partir de Castrillo de los Polvazares.
Así que nos fuimos hasta Astorga y de allí a Castrillo. No paramos en este bonito pueblo pues ya lo vimos en otra ocasión.
Poco más adelante hay una bifurcación que debíamos haber tomado hacia la derecha para seguir el camino pero nos fuimos a la izquierda. De este modo acabamos en Santa Colomba de Somoza. Ya allí y dándonos cuenta que habíamos perdido el camino, decidimos darnos un paseo por el pueblo.


Se mantiene bastante original con grandes casonas hechas de sillar de noble planta. Puertas, ventanas y corredores están pintados de azul dando un curioso contraste.
Vimos unos carteles que anunciaban la laguna Cernea. Ya había oído hablar de que se trata de una antigua laguna artificial creada por los romanos para almacenar agua para sus lavados de tierras de los terrenos cercanos para buscar oro.
Nos dirigíamos hacia ella cuando nos encontramos un hombre mayor que, al preguntarle por la laguna, se ofreció a acompañarnos ya que iba a dar un paseo. Nos contó cosas curiosas como que tenía 84 años y que había sido alcalde del pueblo. Antes de llevarnos a la laguna nos enseñó su casa que decía era típica maragata. Exteriormente la casa solo muestra una largo muro de sillar con apenas alguna pequeña ventana y coronado por un tejado. Una vez se entra por el portal para carros se accede a un amplio patio cuadrado a cuyo alrededor se encuentran todas las dependencias. Un primer piso está recorrido por un largo corredor que da acceso a las habitaciones superiores. A la izquierda se encuentran los establos y gallineros. Una vieja parra cargada de racimos de uva da sombra a buena parte del patio.


Nos invita a entrar a una de las dependencias inferiores donde hay una amplia sala que según cuenta usaban para guardar los artículos que transportaban. En el suelo hay una argolla donde ataban a los animales. Hay que recordar que los maragatos eran en gran parte arrieros que se dedicaban a llevar mercancías de Galicia a la Meseta. De ahí estas grandes y sólidas casas obtenidas con las ganancias del comercio. A la derecha otra gran sala era la antigua cocina. Ocupa el centro una enorme chimenea tan grande como una habitación, rodeada de bancos donde la gente se aprovechaba del fuego del centro. Cuelga sobre el fuego una gran cadena o llar donde colgaba el caldero donde se hacia la comida. Lo curioso es que rodeando la chimenea hay un balcón en la planta alta. En el piso no hay falso techo y se ve el tejado. Todo el balcón y el espacio hueco están lleno de cuerdas donde colgaban la matanza para que se secara e incluso ahumara. Se puede observar incluso los trozos de hojalata que cuelgan en los bordes de estas cuerdas para que los ratones no puedan acceder a la comida.
La mujer nos comentó que la casa tiene catorce habitaciones y tres cuartos de baño.
Según cuenta proceden del pueblo de La Baña en la Cabrera. De este pueblo tan aislado salieron a este otro para poder dar mejor educación a sus hijos.
Finalmente salimos del pueblo en busca de la laguna Cernea. Nos introducimos en un joven bosque de robles. Se puede observar en él montones de bolos y largas zanjas que formaban parte de las labores de búsqueda de oro de los romanos. Apenas a un kilómetro de un camino poco señalizado se llega a una larga hondonada que forma la laguna y que hoy día está seca. Como pasa en otros sitios antiguamente estaba llena de agua todo el año. Hoy día se seca todos los veranos. El hombre sigue su paseo y nosotros volvemos hacia el pueblo.

Es curioso también los carteles que vemos en esta zona que indican que el terreno es propiedad del ministerio de Defensa. En toda la excursión de hoy vemos multitud de zonas con estos carteles. Se trata de zonas donde se sitúan baterías de artillería para disparar hacia el Teleno donde hay un campo de tiro. Es curioso ver que hay distintos pueblos en el camino de los proyectiles.
Cerca de él, gracias a las indicaciones del antiguo alcalde, conseguimos encontrar las tumbas que anuncia algún cartel. Es un profundo hoyo donde aparecieron en el fondo una especie de amplios nichos hechos de sillar de pizarra. Es curioso pues son distintos nichos uno al lado del otro y parece que hechos en el mismo momento. No sé si se construirían y luego se irían empleando o si se empleaban para un enterramiento colectivo al mismo tiempo.
 

He buscado en internet fotos de una tumba fenicia para comparar. He encontrado una foto de las tumbas fenicias de Punta de Vaca en Cadiz y son muy similares a las encontradas aquí por lo que si pueden ser fenicias. De todas formas me extraña que los fenicios anduvieran por estos lugares del interior. Es curioso que en algunos escritos que se comenta la peculiaridad de las costumbres de los maragatos y se apoyan en que puedan proceder de otros pueblos distintos a los de la peninsular. Su espíritu profundamente comerciante de los típicos arrieros ha hecho decir a más de uno de la posible procedencia fenicia o de otros pueblos extraños.

De un foro de Celtiberia.net
“El benedictino Fray Sarmiento (SXVIII) en su manuscrito "Astorga: descripción de la Maragatería" sostiene que el grupo desciende de " mauritanos o cartagineses" dedicados al comercio y que perseguidos por los romanos se refugiaron en las montañas de Astorga. y recibieron el nombre de maurellos o mourellos.tambien se atribuye el termino a "mauri capti" (moros cautivos) o de mauro gotho .El origen norafricano o bereber quedaria descartado con el estudio del Departamento de Genetica, Facultad de Biologia, Universidad de La Laguna, La Laguna, Tenerife, Spain. Mitochondrial DNA characterisation of European isolates: the Maragatos from Spain.Larruga JM, Diez F, Pinto FM, Flores C, Gonzalez AM…
…la sugerencia es que el nombre corresponda con los arrieros, que se dedicaban a la maragateria, esto es: trasporte de bienes con recuas de mulas y por extension mas tarde a todos los habitantes de la somoza. del latin mercatus. Pareciera ser que el estilo de vida de los maragatos, su capacidad para el comercio y obtener buena rentabilidad de ello no resultaba muy agradable a sus vecinos, bastante menos afortunados economicamente. hay un texto que puede leerse en internet, de George Borrow The Bible in Spain, capitulo 23, http://etext.library.adelaide.edu.au/b/borrow_g/bible/chapter23.html, sobre astorga y los maragatos vistos a los ojos de un extranjero en 1842 y dice bastante sobre su forma de comerciar”.
Tras ver las tumbas fenicias nos paramos en el pueblo a tomar un par de cervezas y refrescarnos. Tuvimos ocasión de preguntarle al camarero sobre los petroglifos de la zona y nos indicó donde podríamos encontrar uno de ellos.
Así que nos fuimos para allá. Nos dirigimos hacia el pueblo de Lucillo. Como medio kilómetro después de pasarlo hay un desvío a la izquierda que lleva a Filiel. Nos comentó el camarero que poco después de este desvío hay una curva cerrada y a continuación un camino de tierra que lleva a una cantera de pizarra. En el camino hay una cadena pero andando se podía llegar a los petroglifos.
La cuestión es que al poco nos encontramos con una curva cerrada y a continuación un camino de tierra a la derecha que nos lleva a una cantera cerrada con una cantera. No se porque pero al poco de caminar hacia la cantera la cosa no cuadraba. No se veía donde podía haber unos petroglifos.
Sin embargo desde allí mismo vimos un cerro enfrente, un poco más adelante en el que sentíamos que podían estar los petroglifos no se muy bien porque. Quizás porque era un cerro destacado, rocoso y con algunos farallones destacados.
Cogimos de nuevo el coche y continuamos por la carretera. Pronto encontramos otra curva cerrada y otro camino, esta vez a la izquierda, y que se dirigía hacia el cerro que nos atraía. Fuimos con el coche hasta llegar poco antes de una cadena que cierra el camino y que se dirige hacia una cantera. Allí hay un hito que marca la llamada ruta del oro que hay en esta zona. Seguimos por el campo y sin dificultad encontramos dos piedras sueltas donde estaban los petroglifos. Hay un par de carteles en el suelo donde explica lo que son.

En esta zona la roca que hay debajo de la escasa tierra vegetal es pizarra de color claro dispuesta en estratos casi verticales con una ligera inclinación hacia el suroeste. Esto hace que en la ladera del cerro se vea una serie de líneas rocosas de estratos que sobresalen ligeramente sobre el terreno. En una de estas líneas de disposición noroeste – sureste es donde están las dos grandes rocas con superficie muy plana y con los petroglifos. No está en la parte más alta del cerro sino en la ladera sur.
Una vez fotografiados los petroglifos subimos a la parte más alta del cerro a ver si por allí se veía algo más como otros grabados o cerámica o algo así. Además llama la atención un farallón rocoso que destaca sobre el suelo en una de esas líneas de estratos.
Avanzamos hacia la cumbre y no se ve ningún rastro de cerámica ni de nada. En la cumbre tampoco se ve ningún resto de lo que pudiera ser un poblado o algo similar aunque no hacemos una visita demasiado exhaustiva.
El terreno ha sido ripado por un bulldocer no se si con motivo de alguna reforestación o por exploración de las canteras de pizarra.Pero ni con el removido se muestra la existencia de ningún resto.
Si llama la atención el farallón rocoso. Por un lado hay unas rocas que si parecen formar parte de los estratos del terreno. Sin embargo hay otras que parece como amontonadas y no encajan bien. Al principio yo creía que podían haberlas movido en el ripado pero es raro que se hayan esforzado en hacerlo siendo de gran tamaño y además no acaban de encajar. Posteriormente he leído comentarios en internet de que esas piedras parecen haber sido allí colocadas.
 

Destacan un par de piedras en forma de caparazón de tortura. Algo redondeadas por fuera y ahuecadas por dentro. También se observan en algunas rocas como unos orificios rectangulares de unos centímetros de profundidad, 2 o 3 centímetros de ancho y 4 o 6 de largo.
Luisa en una de las caras planas de la roca cree observar como unas letras ligeramente grabadas. Hay otra cara en la que si que hay letras grabadas pero estas parecen modernas.
He leído después en internet que hay en las cercanías unos regueros que van a confluir en unos pozos a modo de aljibes excavados en la roca para almacenar agua pero nosotros desconocíamos su existencia y no los vimos.
Lo más curioso que se ha escrito sobre este lugar son las marcas claras como puntos que se ven en las imágenes de satélite como alineadas y que forman una especie de recinto rectangular en el que se incluyen los petroglifos y el farallón rocoso. Según cuentan en el lugar no hay forma de detectar nada que forme estas marcas.
Tras ver los petroglifos continuamos por Filiel, Boisan, Quintanilla de Somoza, hasta Luyego de Somoza. Allí nos paramos a contemplar la curiosa ermita de la Virgen de los Remedios y su especie de plaza porticada en la que se montan tiendecitas en la romería.

Llegamos hasta Santiago Millas a comer en el restaurante de Lucinio pero está de vacaciones. Así que nos volvimos hasta Castrillo de los Polvazares a comer un cocido maragato.
La comida la hicimos en el hotel restaurante Cuca la Vaina que está cerca de la iglesia. Comimos un cocido maragato por 50 euros los dos. No nos acabó de gustar pues estaba muy salado todo. Los trozos de carne curada no habían sido lo suficientemente desalados. Nos pusieron unas rodajas de tomate crudo para acompañar la carne y estaban saladísimas. La berza escasa y los garbanzos contados. La sopa demasiado concentrada, cuando lo agradable de tomarla al final es que sea suave. El vino, un mencía del Bierzo muy bueno. El ambiente del comedor cómodo y agradable. Me pasé el resto de la tarde tomando agua, No obstante no me resultó nada pesado que es lo bueno del cocido maragato a pesar de ser contundente. 

domingo, 29 de agosto de 2010

10-08-29 Abrigos rupestres de Fresnedo (Teverga. Asturias).

 Situadas en el concejo de Teverga, en Asturias.
Para acceder desde León, lo suyo, es subir a Babia y por la LE – 481 ir al puerto de la Ventana por el que se pasa a la provincia de Asturias. Aquí la carretera se convierte en la AS- 228. Según se baja el puerto se pasa por el pequeño municipio de Páramo y, tras pasar por el desfiladero donde está la cueva Huerta, hay un desvío al municipio de Fresnedo que está un poco más arriba en media ladera. Al poco de coger el desvío y, antes de llegar al pueblo, hay un pequeño aparcamiento y zona con mesas donde está el comienzo del sendero que va a las cuevas con pinturas rupestres.
Caben unos 10 coches.
Se trata de un conjunto de 4 abrigos rocosos con pinturas rupestres esquemáticas de la edad de bronce y del hierro según lo escrito sobre ellas. En algunos documentos se habla de 5 abrigos pero realmente la quinta no está señalizada y solo contiene una pintura.
El sendero está bastante bien marcado con marcas de sendero de corto recorrido (señales amarillas y blancas). También hay algún poste indicador y carteles en las cuevas ya un tanto viejos.
No obstante se habla de un recorrido circular, que realmente no lo es. A mitad de recorrido no llega hay una vuelta bastante confusa y mal señalizada que hace dar un recorrido bastante tonto.

El primer abrigo que aparece obliga a desviarse un poco del camino principal y tiene un acceso un tanto peligroso a pesar de que tiene ayuda con unas cuerdas. Hay que deslizarse culo en tierra por unas superficies rocosas con el precipicio que da al desfiladero de la cueva Huerta abajo. No es muy recomendable para niños salvo que estén bien educados y sean controlables por sus padres.
En él se pueden ver varias figuras esquemáticas de animales y de personas. También se ven unas huellas de dedos a modo de huellas de pisadas de animales. Se ven bastante bien y están en buen estado. Este abrigo se llama de Cochatoria.

El sendero a partir de aquí serpentea subiendo sin parar y adentrándose hacia el interior del desfiladero por su parte alta. Algunos sitios no son aptos para gente con vértigo pues se pasa muy cerca de fuertes cortados. El sendero es muy aéreo y con fuertes pendientes. El sendero además está poco pateado y es incomodo por la cantidad de rocas sobre las que hay que caminar y, en otros puntos, con hierba alta con la que no se ve bien donde pisas.

Ya con buenas vistas al desfiladero encontramos el abrigo del Paso donde hay algunas figuras de animales. Uno de ellos parece más el dibujo de una ermita que un animal. A continuación se cruza una inclinada pradera y hay que estar al tanto para llegar al abrigo del Ganado. Aquí se encuentran las figuras de personas menos esquemáticas y más detalladas. De hecho a nosotros se nos pasó esta cueva y estuvimos buscando un buen rato hasta encontrarla.
Ya el último abrigo es el llamado Trechacueva con una figura que parece una cruz pero es un monigote.
A partir de aquí no hay ninguna marca de fin de sendero ni nada con lo que uno se queda sin saber que pasa y más creyendo que el sendero es circular.
Al final nos volvemos sendero atrás hasta el desvío antes comentado que se supone que es la ruta circular. Este desvío nos lleva por una ladera muy incómoda de caminar, muy rocosa, formando una especie de lenar y mal marcada por lo que varias veces nos hemos tenido que parar para ver por donde ir. Incluso hemos tenido que volver alguna vez atrás.
Al final se llega a una antigua vereda que a su ver es barranco por lo que se va entre barro y moscas aunque por lo menos por una buena umbría. Destacar el viejo empedrado en esta vereda. Al final se llega a una pista que llega al pueblo. Por último hay que bajar por la carretera hasta donde se dejó el coche. Un rodeo gratuito que hace duro el sendero.
Desde luego para el que le gusten las pinturas rupestres vale la pena que haga el recorrido. También es bonito las excelentes vistas del desfiladero.

domingo, 15 de agosto de 2010

10-08-15 Peña del Reguerón (León).

Buen día para hacer montaña.
Había preparado hace tiempo la subida al Cirbanal pero cuando llegué al comienzo de la ruta vi que el track que había metido no correspondía a lo que había leido sobre el ascenso. Yo había leido que se subía desde Robledo de Caldas. Sin embargo el track estaba preparado para subir desde Caldas de Luna.
Resultado que no llegamos al Cirbanal sino que acabamos en otro pico llamado Peña del Reguerón.
Aparcamos el coche al final del pueblo de Robledo. Allí vimos que no había ningún camino que siguiera adelante por el valle, ni siquiera senda. Así  que tomamos montaña arriba hacia el nordeste para ir buscando el pico que entendíamos que quedaba a la derecha nuestra.
Después de un duro ascenso llegamos a una pista forestal que parte del comienzo del pueblo y que va hacia donde nosotros pretendíamos. Así que la seguimos y fuimos bordeando la sierra buscando un ascenso más suave que lo que se nos presentaba a la vista. Había leido que había que ir bordeando.




Así que seguimos por el valle adelante por la pista hasta llegar a una caseta de pastores. Allí vimos que había unas canales de prado que subían hacia la sierra y por allí nos fuimos. Aunque estas canales parecen que son suaves debido a estar cubiertos de prado la cosa era bastante dura. Al final llegamos a un collado de la sierra y vi por el gps que el pico, al contrario de lo que creía, quedaba a nuestra izquierda (más hacia el este). Cruzamos a la ladera sur y vimos que el paso era, no imposible, pero si complicado y además no veíamos el pico por ningún lado.
El tiempo iba corriendo y decidí subir el pico que veíamos a la derecha y que fuera el que Dios quisiera. Quedaba algo más fácil.


Así que hasta allí nos subimos. Ahora mirando en internet veo que este es el pico del Reguerón. Para otra quedará el Cirbanal.  De todas maneras la diferencia es pequeña.




Arriba en el Reguerón encontramos trincheras de la guerra y una estupenda vista del valle de Luna, de la zona de casa Mieres y Peña Ubiña, Babia, valle de Arbás …
Bajamos dando el mismo rodeo. No nos arriesgamos a bajar recto a pesar de estar el pueblo justo abajo. No queríamos sorpresas.
Abajo nos encontramos una buena sorpresa. Hay una gran sima excavada en la caliza.




También encontramos fósiles en las rocas.

Cuando llegamos al pueblo habíamos hecho 10,5 km y 800 metros de desnivel. El pueblo está a unos 1240 y el pico a 2045.

domingo, 13 de junio de 2010

10-06-13. Abelgas de Luna (León).

A pesar de que estamos en junio hemos tenido una semana muy lluviosa y fría. No obstante el mal tiempo no nos echa atrás y hemos salido al monte. Teníamos la esperanza de que el día de hoy saliera bueno y de hecho en la zona de Huergas no había mucha nube. Sin embargo según subimos hacia el puerto de Aralla el tiempo se fue cerrando. La idea era de subir el pico Cirbanal pero ya en la zona del embalse vi que el día estaba demasiado lluvioso para subir.
Así que decidí ir al pueblo de Abelgas de Luna para ver la cascada que dicen que hay. Realmente no es una cascada natural sino un aliviadero de un canal de alimentación de una minicentral eléctrica.
Subimos hacia Babia y a la altura de Sena de Luna nos desviamos por la pequeña carretera que va a Abelgas de Luna. El camino era espectacular pues el río Luna iba muy cargado y el embalse del mismo nombre estaba tan lleno que el agua casi llegaba hasta el borde de la carretera. Tras bordear un buen rato el embalse la carretera empezó a internarse por un pequeño barranco entre peñas y con una vegetación casi selvática. Al final el barranco se abre un poco y allí aparece el pueblo que, a pesar de lo escondido que está no es tan pequeño. Supongo que muchas de las casas están rehabilitadas por gentes que no viven allí.
Destacar de este pueblo la gran iglesia moderna que tiene que no se a que se debió su construcción.
Volvimos por la parte más cerrada del barranco donde al subir vimos una minicentral eléctrica. Paramos en el azud del canal que vimos que estaba cerrado. Seguimos hacia la central eléctrica. El canal apenas se veía por la ladera de tanto arbolado que tenía.
En la central eléctrica vimos que había una persona y entablamos conversación con ella. Nos comentó que había cerrado el canal hace un par de días porque bajaba demasiada agua por el río. Si hubiéramos venido entonces hubiéramos visto la cascada del aliviadero. Por otro lado contó que la minicentral no turbinaba agua desde hace un año y echaba la culpa al Estado porque no les daba permiso. Pienso que la cosa es al revés y forma parte del juego de las grandes eléctricas de desperdiciar el uso de esta energía gratuita por intereses bastardos. Nos dejó ver la minicentral. Posee dos turbinas una el doble de grande que la otra. Una es de 1927 y la otra de 1929 y están en perfecto estado para funcionar.

 
Leí en internet que era una minicentral perteneciente a un pueblo hoy desaparecido bajo las aguas del embalse de Luna, llamado Láncara. De hecho la minicentral se llama de Láncara.
Tras verla nos fuimos al pueblo de San Emiliano, en Babia y de allí subimos a Pinos donde dejamos el coche. La idea era de ir a Casa Mieres. Había visto en imágenes de satélite que de este pueblo sale el camino que cruza a Asturias pero no sabía en qué estado estaba. En Pinos vimos que el camino era de tierra y además en bastante mal estado.
Sin embargo comenzamos a caminar y a seguirlo a ver hasta donde llegábamos. Pronto vimos que el camino en su tiempo debió de ser un intento de carretera hacia Asturias pues goza de unos impresionantes muros de piedra y buenos puentes. Incluso hay zonas donde se puede ver una buena capa de balasto sobre él.

Pisando barro subimos casi cuatro kilómetros hacia arriba. Al final llegamos a un punto donde el arroyo cruzaba el arroyo, ahora muy crecido, y no pudimos seguir. No sé porque motivo no hay puente en este punto pues hasta allí no habíamos tenido problemas cruzando buenos puentes de buen tamaño. La cuestión es que a poco más de un kilómetro de la casa nos tuvimos que volver.

domingo, 21 de marzo de 2010

10-03-21 Las fuentes de boñar (León).

Otro día que hemos decidido solo dar un pequeño paseo.
Nos hemos ido a Boñar para comprar unos nicanores que son unos hojaldres típicos del lugar pero de paso hemos ido a buscar las fuentes que hemos oído existen en este pueblo medicinales.
De paso en La Vecilla hemos parado para comprar una hogaza de kilo, que en este pueblo la hacen de gran calidad.
Una vez en Boñar hemos cruzado prácticamente el pueblo por la carretera LE-331. Giramos hacia la izquierda donde pone una indicación de campamento juvenil. Por este lugar llegamos a un área llana de zonas recreativas de gran extensión. Allí está el camping municipal, las piscinas y un campamento juvenil. También hay amplias zonas de recreo. Es un lugar bonito y relajante aunque dicen que en verano se llena de gente de picnic.
Preguntamos a un hombre que paseaba por el lugar por las fuentes. Accede a acompañarnos pues está dando un paseo. Así que dejamos el coche y comenzamos a andar. Vamos atravesando los prados hasta llegar de nuevo a la carretera. Pasamos por una acequia donde quedan restos de una minicentral eléctrica antigua según nos comenta el paisano. Llegamos a la carretera y, al final del pueblo están las fuentes. La primera es de aguas ferruginosas. Está un poco apartada de la carretera, por un camino de tierra, a unos 20 o 30 metros. Claramente el sabor es ferruginoso.
Hay otras dos más adelante. Están a la derecha, frente a un edificio grande. Hay una primera donde la gente coge agua. Esta sale de una franja de rocas silíceas de cuarcitas. Un poco más adenlante hay una casa y al final de esta hay una habitación con ventanas a través de las cuales se puede ver una balsa de donde el pueblo toma agua.

Según cuenta el paisano el edificio grande, el de la izquierda de la carretera, fue un sanatorio antituberculoso y posteriormente un colegio regentado por los agustinos. Luego lo cerraron y lo vendieron. Más modernamente fue un albergue pero duró poco y ahora está prácticamente abandonado. Es una lástima pues es un buen edificio. El de la derecha, el que está entre las dos fuentes fue una especie de balneario pero para uso de los agustinos y por lo que se sabe lo mantienen aunque no lo usan. En fin como siempre infraestructura infrautilizada.
Tras esto nos volvimos por un camino que hay algo más hacia el pueblo y que lleva a un puente que dicen es romano. Desde luego la traza es antigua  y originalmente fuera romano pero la factura actual probablemente sea medieval. Con esto cruzamos el Porma y fuimos de vuelta a donde dejamos el coche. Por el camino nos mostró un montón de piedras allí tiradas procedentes de la cantera de talco que hay en la Puebla de Lillo y que transportan hasta este pueblo para molerla y transformarla en ese producto. Esta fábrica pertenece a Rio Tinto Company y ahora quieren cerrarla aduciendo que la cantera está agotada. La realidad es que la globalización ha hundido esta empresa como muchas otras. Por lo que cuenta el paisano es la única mina que produce talco comestible pues los demás son cancerígenos.
También en esta zona se ve el canal de toma de una minicentral eléctrica moderna que por lo que nos comentó está aguas abajo, a la altura de la CL-626.
Tras este paseo nos fuimos para casa.

domingo, 28 de febrero de 2010

10-02-28. Grajal de Campos (León).

Tras la borrasca del día de ayer que tanto magnificaron las televisiones, ha venido un día de calma.
Y lo hemos aprovechado para hacer una de nuestras excursiones.
Hace unos días me llamó la atención, buscando por internet, el pueblo de Grajal de Campos. Consideran una joya arquitectónica del renacimiento la escalera del palacio que hay en este pueblo. Ya buscando más cosas vi que también tiene un castillo.
Así que nos fuimos para allá. Está un poco al sur de Sahagún. Nos costó sobre una hora bajar desde Huergas de Gordón.
El pueblo está en los llanos cerealistas de León, ya lindando con la provincia de Valladolid y con la de Palencia.
Cuando llegamos sobre las once el pueblo estaba prácticamente dormido. Pocas personas vimos por la calle. Más tarde empezaron a aparecer. El aire era gélido y la ligera brisa lo hacía más insoportable.
Aparcamos el coche en la misma puerta del palacio. Es uno de estos pueblos en los que hay tan pocos coches en la calle que no sabes si se puede aparcar o no.
El palacio es un enorme caserón cuadrado con cuatro torreones en sus esquinas. Una de ellas conecta con la iglesia dando lugar a un pasadizo que une las calles. Se ve que está en restauración. Está cerrado.
Damos la vuelta a la manzana para husmear por las puertas y ventanas a ver que vemos.
Llama la atención los materiales con las que hicieron los edificios. Poca piedra y mucho adobe y ladrillo. Esto da lugar a grandes problemas de conservación. Destacar de este paseo los ventanucos a nivel del suelo en las casas que da ventilación a antiguas bodegas. Nos comentó el alcalde en su tiempo que está fue una zona vinícola en su tiempo aunque de escasa calidad. Ahora algunos están volviendo a replantar vid.
Tras esto nos dirigimos al castillo. Es de planta cuadrada de bajas pero potentes murallas. Se construyó en el siglo XVI. En esta época vivía en la población una poderosa familia de apellido Vega que construyeron el palacio, el castillo y otros edificios. Eran los señores de Grajal.


Este castillo se cuenta fue el primero que se construyó en España para resistir ataques artilleros. De ahí su poderosa fortificación, sus bajas murallas, el gran espacio tras las murallas y las grandes troneras.
De todas formas se supone que se construyó más para demostrar poder que por su eficacia dado que se encuentra en el interior de España, en una época de estabilidad y apartado de los caminos. Añado yo que también está en un montículo bastante bajo, inferior al del pueblo y muy cercano a la población lo que lo hace ineficaz para bombardeos por el  lado en el que se encuentra el pueblo.
No lo podemos visitar pues se encuentra cerrado. Parece que en verano la Diputación envía guías que lo enseñan.
Llama la atención la ínfima puerta que tiene. Apenas un portillón en todo el contundente y gran recinto cuadrado del edificio. El portillón por donde solo cabe una persona además está a un lado, junto a una de las torres esquineras y por el lado contrario al de la población.
Cuentan que en una de las torres había una fábrica de pólvora con molinos para el carbón y el azufre. No sé como moverían esos molinos pues no creo ni que pudiera entrar un animal al edificio y tampoco había agua.
Volvimos hacia el coche y entonces nos encontramos con el alcalde que es el que se dedica a enseñar el palacio. Es un hombre jubilado pero todavía con buen vigor. Cuenta que el también emigró y lo hizo a Vascongadas. Cuando se jubiló se volvió al pueblo y ha estado como alcalde peleando para que el pueblo no acabe de morir.
Antiguamente tuvo una gran importancia como cabeza de condado y con mercado. Hoy es un pueblo en franca decadencia a pesar de que se ven nuevas construcciones probablemente de gente procedente del lugar que veranea aquí.


El alcalde no para de moverse intentando poner en valor los numerosos edificios de que dispone. Con un presupuesto de 17.000 euros solo las subvenciones le permiten ir rehabilitando los edificios.


Nos enseña el edificio. Por lo que cuenta, el consiguió que la familia propietaria se lo vendiera por el simbólico precio de 6 pesetas. Cuando lo adquirió estaba prácticamente en ruina y desmantelado por el pillaje.
Tiene un gran portalón de entrada en su fachada principal. En la puerta todavía se pueden ver herrajes en forma de concha indicando que por aquí también pasa un camino de Santiago el llamado de Madrid que confluía en Sahagún con el francés.


La entrada da directamente al patio central con claustro bajo y alto alrededor del cual se distribuye toda la casa. Este palacio empezó a construirlo, entre los años 1517 a 1523, Don Hernando de Vega señor de Grajal y Maestre de la Orden de Santiago. Buscó al arquitecto italiano Lorenzo de Adonza.


La terminó su hijo D. Juan de Vega, embajador ante la Santa Sede,, virrey de Sicilia y Presidente del Consejo del Reino.


La influencia italiana se ve en el enorme balcón o logia que da a la plaza mayor o la escalera que es de los elementos más reconocidos del palacio.
El patio es amplio y esbelto dando lugar a un gran espacio que francamente en estas zonas tan frías no sería muy utilizado. Cuenta el alcalde que el patio estaba prácticamente desmantelado. Muchas columnas y balaustradas habían desaparecido y las que quedaban estaban en muy mal estado. Hoy tras una profunda rehabilitación con elementos creados de nuevo pero manteniendo la similitud con los antiguos el patio luce de nuevo. Aquí por suerte la arquitecta que lo dirigió no metió elementos modernos como les gusta hacer a muchos de su profesión.


La escalera está nada más entrar al patio a la derecha. Está adornada con yeserías con motivos vegetales y geométricos. Tan solo hay dos hipopótamos que recuerdan a una batalla que los propietarios dirigieron en Túnez. También hay un león en el remate de la barandilla. En el primer piso hay distintas dependencias del palacio. Grandes habitaciones a las que se accede desde el patio y cuyas ventanas dan a la calle. Parece que las principales habitaciones, las más nobles, daban al oeste a la puerta principal.
A continuación nos enseña el pasillo que hay en palacio y que lleva al palco que da al altar de la iglesia, desde donde la familia oía misa. En ese mismo corredor hay una habitación que dice es donde dormía la mujer de Juan Vega que era nieta de San Francisco de Borja.
Existía en ese lugar una escalera de caracol por donde el cura subía a darles la comunión, así ellos no tenían que bajar y mezclarse con el populacho.
Destacar también la gran logia que desde la planta baja daba a la plaza mayor del pueblo. Por la pendiente del terreno desde la plaza el corredor es un primer piso.
No cobra por la visita pero si le dices algo te enseña un buzón donde dejar la voluntad para pagar gastos.
En la misma manzana del palacio hay un patio cerrado por tapiales que se llamaba el huerto de los olivos donde la familia gustaba de tener plantas medicinales que recogía por distintos lugares. De ello no queda nada.
Tras ello vamos a visitar la iglesia que está bajo la advocación de San Miguel. Tuvimos la suerte de que la abren a las 12 h 30’ para misa y pudimos visitarla.
Fue edificada también en el siglo XVI en los mismos años que el palacio. Fue basílica hasta el siglo XIX. No pensaba yo que una iglesia una vez nombrada basílica pudiera dejar de serlo.
Tiene exteriormente un estilo mudéjar marcado por el uso del ladrillo.
Tiene en el interior numerosas imágenes antiguas. En el altar hay dos armarios cerrados con reliquias regaladas por el papa a la mujer de Juan Vega. Solo se muestran el día de la Candelaria.
También destaca la torre con 5 esquinas. La hicieron así para que no ocupara tanta calle.
El pueblo cuenta el alcalde que llegó a tener 5 parroquias de la que no queda ninguna después de la desamortización.
El pueblo tiene otros monumentos que no vimos como son:
La ermita de la Virgen de las Puertas. La ciudad estaba amurallada; de ello no queda nada salvo la puerta de San Andrés. En el torreón defensivo de esta puerta es donde se sitúa la ermita de la citada virgen patrona del pueblo. De esta puerta destacan la pequeña estatua que hay en una hornacina que es romana y que representa a Hercules niño. Los romanos lo solían poner en las puertas de entrada para proteger la población. Se ve que alguien mantuvo esa costumbre.
Hospital de Ntra. Sra. de la Antigua. Es un caserón fuera del pueblo que construyó Blanca Enriquez para atender a los enfermos y pobres del pueblo y que funcionó hasta el 1778. El alcalde cuenta que cerca de este edificio descubrió numerosos cadáveres de los que nos enseñó las fotos y que fueron los que morían en el hospital.
Convento de Ntra. Sra. de la Antigua. Lo fundó Juan Vega (nieto) para panteón de la familia. Fue monasterio de monjes Franciscanos Alcantarinos hasta la desamortización en 1835. Impulsaron la cultura del lugar. En 1881 volvió a ser adquiridos por un grupo de monjas que vivieron hasta el 2006. Hubo polémica cuando se fueron pues se llevaron a Toledo todas las imágenes de valor que había en el convento. El convento lo vendieron a un particular y no se sabe que va a hacer con él.
Tras esto paramos en Sahagún a tomar unas cervezas y nos volvimos para Huergas.
Destacar la existencia de Tomasa Enriquez Borja que era nieta de San Francisco de Borja y mujer de Juan de Vega, y Toledo 2º conde de este lugar. De ello quedan dos grandes cuadros de San Francisco de Borja en el altar de la iglesia. En uno de ellos hay una niña que era ella misma. Vivió sus últimos años en palacio en una pequeña habitación en el corredor junto al palco que da a la iglesia.



Los Borja procedían de Borja (Zaragoza). Era una familia influyente que se estableció en Jativa y luego en Gandía. Tuvieron mucho poder y llegaron dos de ellos a ser papa. De esta familia nació San Francisco de Borja que llegó a ser también muy influyente en la corte de Carlos I de España e Isabel de Portugal.
Cuando murió esta última acompaño el féretro hasta su tumba en Granada y vio una mujer bella en lo que se había convertido.
Por ello dijo “nunca más servir a un señor que se pueda morir” Por ello se hizo cura tras morir su mujer y vivió en santidad.
Mientras vivió en la corte se casó con Eleanor de Castro Melo e Menezes, con la que tuvo ocho hijos: Carlos, Isabel, João, Álvaro, Fernando, Afonso, Joana y Doroteia
Álvaro  de Borja y Castro, que nació en 1534 en Toledo se casó con Elvira Enriquez de Almasa y Borja, que era hija de hija de Juan Enriquez de Almansa y Rojas y Juana de Borja y Castro. Esta mujer nació en septiembre de 1551 en Alcañices. Fue la V marquesa de Alcañices. Tuvieron 7 hijos uno de los cuales fue Tomasa de Enriquez de Borja.
Por lo que veo Elvira Enriquez de Almasa y Borja, era sobrina de Álvaro de Borja y Castro pues la madre de ella era hermana de él.
Lo que también me llama la atención es que Tomasa se apellide primero Enriquez y luego Borja cuando debía ser alrevés. No se si es que el apellido Enriquez lo consideraban más importante. Por lo que he visto en internet la familia Enriquez era muy importante. Esta claro que se casaban entre familias importantes pues luego Tomasa también lo hizo con Juan Vega que también era muy reconocido.
Por fin Tomasa de Enriquez de Borja se casó con Juan de Vega y Toledo y se fue a vivir a Grajal de Campos.
Pero cuidado, este Juan de Vega no es el hijo de Hernando de Vega que participó en la construcción del palacio sino un nieto. Hernando de Vega (señor de Grajal) se casó con Blanca Enriquez de Toledo y tuvo un hijo que fue Juan de  la Vega. Juan de la Vega (señor de Grajal) se casó con Leonor de Osorio y tuvo 3 hijos: Pedro de Vega, Isabel de la Vega y Osorio y Elena de Vega y Osorio Sarmiento. Pedro de Vega (señor de Grajal) se casó con Jerónima Enriquez y tuvo un hijo que fue Juan de Vega y Toledo (1er conde de Grajal) que fue el que se casó con Tomasa en 1565.  En el artículo que hay en “condes de grajal.pdf” parece que confunde a estos dos Juanes y casa dos veces al primero con Leonor de Osorio y con Tomasa. (La verdad es que este articulo cuenta una genealogía bastante diferente).
Juan de Vega y Menchaca se casó con Juana de Borja y Hénin y no tuvo hijos por lo que el título pasó a su hermano.
Su hermano Francisco de Vega Machuca se casó con Leonor Rodriguez de Villafuerte, (señora de Villafuerte) y parece que tampoco tuvo hijos.
El condado pasó al 3er hermano. Pedro Álvarez de Vega que se casó con Teresa de Benavides Silva y Manrique de Silva que tuvieron un hijo llamado Gaspar de Vega Benavides, (6º. conde de Grajal).
Gaspar de Vega Benavides, (6º. conde de Grajal) murió niño en 1702 y le sucedió su tía, hermana de su padre, Beatriz Francisca Alvarez de Vega (7ª condesa de Grajal de Campos y 5ª marquesa de Montaos).
Beatriz Francisca Alvarez de Vega (7ª condesa de Grajal de Campos y 5ª marquesa de Montaos) se casó con Alonso Pérez Osorio y Fonseca, (6º. conde de Villanueva de Cañedo) y tuvo un hijo llamado Manuel José Álvaro Osorio Vega Enríquez de Guzmán, (8º conde de Grajal y 6º. marqués de Montaos).
Manuel José Álvaro Osorio Vega Enríquez de Guzmán se casó dos veces. 1º con María Luisa de Cárdenas Pacheco y Saavedra en 1696 y después con Josefa Antonia de Guzmán Spínola Enríquez de Porres y Colonna. Entre las dos tuvo 8 hijos. Parece que fue el 4º hijo el que heredó títulos pues los primeros fallecieron pronto o no tuvieron descendencia. El cuarto se llamaba Francisco Javier Osorio y Guzmán, (9º conde de Grajal y13º. marqués de Alcañices).
Francisco Javier Osorio y Guzmán casó con María de la Concepción Fernández de Velasco Tovar Pimentel y Zúñiga y tuvo un hijo llamado Manuel Juan Osorio y Fernández de Velasco (10º conde de Grajal).
Se me pierde el 14º conde de Grajal. Al no tener descendencia supongo que pasaron los títulos al hermano llamado Joaquín Pérez Osorio y Silva-Bazan, 8. conde de La Corzana. Su primer hijo se llamaba José Ramón Gil Francisco de Borja Nicolas Osório y Heredia, (10º. conde de La Corzana).  El segundo hijo de éste es el que consta como 14º o 15º conde de Grajal (según la página). Este se llama Miguel Osorio y Martos nacido en 1886.
Miguel Osorio y Martos se casa con Inês Díez de Rivera y Figueroa y tiene 6 hijos. El tercer hijo es el que hereda el título no se si porque es el primer hijo o por otra causa. Se llama Beltran Alfonso Osorio y Diez de Rivera, (16º conde de Grajal y 20º. duque de Alburquerque).
Beltran Alfonso Osorio y Diez de Rivera, nació en 1918 y se casó dos veces. La primera con Teresa Bertran de Lis y Pidal. La segunda con María Cristina Malcampo y San Miguel, (7ª duquesa de San Lorenzo de Valhermoso). El primer hijo se llamó Juan Miguel Osorio y Bertran de Lis, (17º conde de Grajal y 21. duque de Alburquerque).
Juan Miguel Osorio y Bertran de Lis se casó dos veces. La primera con Beatriz Letelier y Bomchil. La segunda con Blanca de Suelves y Figueroa. Parece que este es el último conde de Grajal.
Es curioso que al final una descendiente de valencianos acabe en Grajal. Como se ve me he entretenido buscando en internet toda la sucesión de condes de Grajal. Destaca sobre todo en los inicios como se casaban familiares con familiares continuamente.