Observaciones a este blog

OBSERVACIONES A ESTE BLOG:
+13-12-20. Tras un periodo largo en el que me he quitado el cansancio que tenía del montaje de mis excursiones, vuelvo a sacar nuevas. Voy a ir hacia atrás sacandolas por lo que hay que estar al tanto.
+ 11-12-25. Los distintos artículos que aquí publico están ordenados por la fecha en la que ocurrió la excursión o acontecimiento. La falta de tiempo, a la que todos estamos sometidos, hace que publique excursiones bastante más tarde de cuando se realizaron. Eso da lugar a que parezca que en la página no se publica nada nuevo pero se están incluyendo artículos en fechas pasadas. Ruego a mis seguidores fieles que repasen un poco los meses y años pasados en busca de artículos que no han leído.

domingo, 17 de marzo de 2013

13-03-17 As Ermidas (Ourense)


Hoy ha salido un día soleado, como un oasis entre tanta lluvia, y no hemos querido dejar de salir a dar un paseo.
Hemos querido ir a ver el poblado de As Ermidas en el concejo de O Bolo. Para ello hemos bajado por la autovía A-52 hasta A Gudiña y allí hemos tomado la carretera OU-533. Pasamos por Viana do Bolo y antes de llegar a Santa Cruz hay un cruce que señaliza As Ermidas.
El santuario está casi en el fondo del valle que forma el río Bibei. La carretera baja hasta el río y allí hay un amplio aparcamiento donde dejar el coche. El lugar está vacío y solo vemos unos pocos pescadores en busca de las cada vez más escasas truchas.
Encontramos en esta zona un curioso molino integrado en las grandes rocas graníticas redondeadas del río. Según leímos en un cartel es del siglo XIX pero parece más antiguo. Dentro hay dos salas pero no queda nada de la maquinaria.


Subimos hasta el santuario que está en la ladera, junto a una gran roca.
Según cuenta la historia en esta zona hubo hasta siete cuevas habitadas por eremitas en época visigoda. Ya en época medieval se encontró por parte de unos pastores la imagen de la Virgen que por las antiguas ermitas que existían se le puso ese nombre.
En el siglo XVII, un obispo de Astorga llamado Alonso Mesía de Tovar se vio afectado por una grave enfermedad. Se encomendó a esta Virgen y sanó. Agradecido, decidió comenzar a construir este santuario. A partir de ahí los obispos de Astorga se dedicaron a mantener este lugar y ampliarlo.
Junto al santuario se creó un poblado esparcido por la ladera.
Según se llega está el atrio o gran patio vallado donde se encuentra la iglesia, la casa del administrador y el pórtico adintelado. En el centro hay un cruceiro. La fachada de la iglesia impresiona debido a su recargado estilo barroco. Llama la atención una fachada como está para un pequeño pueblo.

La casa del administrador es un edificio grande que como su nombre dice era la residencia del administrador así como del obispo de Astorga cuando iba por allí y seminario menor cuando lo fue. Destaca sus dos grandes escudos y los entresuelos acristalados donde están las imágenes que figuran la Santa Cena.

Entrando a la iglesia me ha llamado la atención su reducido tamaño para su gran fachada. Dispone de tres naves pero las laterales son prácticamente pasillos. La central es alta y estrecha y dispone de dos corredores sobre las naves laterales unidas al coro.
El altar es claramente barroco sobresaliendo la cantidad de dorados y plateados.

El techo de la nave central es de madera policromada. Destaca un galeón que hay colgando que se dice fue un exvoto de un marinero que estuvo a punto de ahogarse y se encomendó a esta Virgen.


Destacar de este santuario el viacrucis que recorre todo el pueblo. Las hornacinas son como habitaciones de grande y dentro hay unas imágenes de madera policromada que representan la escena bíblica. Las imágenes están bastante deterioradas y no parecen de gran calidad artística.

Como no había nada más abierto nos fuimos a buscar el pueblo abandonado de Acevedo. Para ello hay que ir hasta O Bolo y luego ir por una serie de pequeñas carreteras hasta llegar al poblado. A nosotros nos costó un poco pues pensábamos que la carretera de acceso estaba cerca de la presa de Prada. Allí nos metimos por una carretera y solo encontramos una cantera abandonada de granito.


Fuimos hacia San Martiño y encontramos la carretera que lleva al pueblo. Este pueblo me llamó la atención en internet pues está muy escondido y en una zona que debe de ser muy bonita con la ribera del río Xares a sus pies.
Efectivamente en el pueblo no vimos a nadie ni ningún coche. A la entrada hay una pequeña capilla que mantiene todavía sus imágenes, bancos y demás. En el pueblo todavía se ven tres o cuatro casas cuidadas pero las demás están abandonadas. En la mayoría los techos ya están hundidos pero algunas todavía se puede entrar y rememorar los viejos tiempos.






En la zona también hay un balneario pero hay que llegar por otro camino. En la parte de enfrente del valle también se ven pueblos como San Fiz que también se ven abandonados aunque a este le hicieron un pueblo nuevo con la construcción del embalse de Santa Baja.

sábado, 2 de marzo de 2013

13-03-02 Baixa Limia (Ourense).

Hemos salido este sábado de excursión junto con nuestro amigo Luis Del Monte.
Hemos ido hasta la zona de la Baixa Límia, la cuenca baja del río Limia antes de pasar a Portugal.
Así, bajamos hasta Xinzo de Limia y nos metimos por la OU-301 hasta Bande. Allí tomamos la OU-540 bajamos hasta el pueblo de Porto Quintela. En este lugar hay un camino estrecho hacia la izquierda con un pequeño cartel indicativo que baja hasta las ruinas romanas de Aquis Querquernnis.
Se trata de un campamento romano que se situó en esta zona para construir y proteger la vía Nova, camino romano que bajaba hacia Portugal.
Bajamos por el camino hasta el borde del embalse de las Conchas y allí, en una barriada de casas encontramos un centro de interpretación cerrado. Poco más allá está lo que se ve del campamento romano. Y digo lo que se ve porque por un lado solo está excavada una pequeña parte y por otro lado está en la zona inundable del embalse. En estos momentos el embalse está prácticamente lleno y se ven las ruinas medio inundadas.
Parece que las ruinas han sido rehabilitadas pues se encuentran en muy buen estado y se distingue magníficamente la muralla del campamento y los distintos barracones donde vivían los soldados.
Esto es la muralla del campamento.
 Se ven perfectamente los habitáculos de los soldados. En cada habitación vivían varios soldados.


 Una de las puertas de entrada al campamento.

 Otra de las puertas al fondo.


Después de ver las ruinas continuamos hacia la población de Santa Comba donde se encuentra la iglesia del mismo nombre. Se trata de una iglesia visigoda del siglo VII de lo que parece que fue un pequeño monasterio de monjas. Está en el interior de la población y es bella por su pequeño tamaño y sencillez. Se puede visitar pero hay que avisar a la mujer que la enseña. Nosotros no nos entretuvimos y nos fuimos tras hacer unas fotos de su exterior. Muestra muchas cicatrices de sus distintas reformas.


  
Continuamos nuestra excursión hasta As Conchas donde cruzamos el río por lo alto de la presa. Ibamos en busca de un dolmen en la zona de Muiños. Siguiendo las pocas indicaciones llegamos hasta la aldea de Maus de Salas donde encontramos el dolmen a los pies de otro embalse llamado de Salas. El dolmen fue desplazado hasta este punto pues quedaba inundado por las aguas. El dolmen está en un lugar lamentable junto a una cantera abandonada y las bancadas de una antigua planta de áridos.

Volvimos sobre nuestros pasos y continuamos hasta Lobios. Y de allí hasta río Caldo donde se encuentra un balneario de aguas termales en un valle privilegiado. Cerca del hotel, junto al río hay una pequeña piscina donde es libre bañarse en agua caliente. El agua termal de este sitio sale por encima de 70 ºC. En la piscina todavía está bastante caliente. Lamentablemente el entorno alrededor de la piscina no está demasiado limpio. Debe dar gusto bañarse en pleno invierno, con nieve, en agua caliente.

Seguimos nuestra ruta por la OU-312. La verdad es que cuando llegamos al campamento romano ya nos sorprendió unas altas y escarpadas montañas al fondo, cerca de Portugal y ahora que estamos cruzando el Parque Natural de Baixa Límia – Terra do Xures vemos esta enorme mole de granito. El recorrido por el valle es especialmente bonito con una enorme cascada que se despeña por las rocas.

  
En el camino una vez pasado el río hay una serie de pilares de rocas que son miliarios romanos en lo que debió ser una cantera de donde se extraían.

En lo alto del valle nos encontramos las antiguas aduanas de Portugal y España y la carretera empieza a bajar fuertemente hacia otro balneario llamado de Gerês.


Allí comimos una buena carne de ternera y luego paseamos por el balneario. Se puede disfrutar de los antiguos edificios del XIX hoy rehabilitados.




 Continuamos nuestro camino hacia la población de Montalegre. Nos metimos por unas carreteras que van bordeando el Parque Nacional de Peneda – Geres. Pasamos por las poblaciones de Cabril y Paradela. Las carreteras son pequeñas y llenas de curvas y fuertes pendientes. En la zona más cercana a Geres los pinares y robledales son densos pero según se avanza hacia Montalegre el terreno se hace más pedregoso y pelado. El granito muestra toda su fuerza y las grandes piedras embellecen el paisaje. Tierras duras de pueblos anclados en el tiempo.
En esta zona encontramos algunos rebaños de vacas de la raza Cachena, destacable por sus larguísimos cuernos.
Llegamos por fin a Montalegre. Ya cansados subimos hasta su castillo en el que se puede todavía contemplar parte de sus murallas, su enorme torre del homenaje y el enorme pozo que debió ser un aljibe. Es impresionante la escalera de piedra que baja por sus paredes hasta el fondo.





Nos tomamos uno de los estupendos cafés de Portugal en un resturante cercano y tomamos la carretera camino de España.
Cruzamos la frontera por Soutelinho da Rafa, pequeño pueblo que está junto a la frontera y que es difícil de distinguir puesto que no hay ninguna aduana.
Tras esto nos volvemos para Verín donde dejamos a Luis y de ahí a A Canda.